Nuevo Crimen en el Ariari

Nuevamente en sus despachos nuestra Censura ética pues durante 9 días, desde el 10 hasta el 18 de julio, policías contraguerrilla hicieron presencia en el casco urbano de Medellín del Ariari, mientras algunos “civiles” armados de la estrategia permanecieron en el lugar, reteniendo al campesino EDGAR PALACIO, a quién posteriormente asesinaron, sacándolo del corregimiento en medio de los controles policiales y los militares.


Bogotá, D.C Julio 21 de 2005

FRANCISCO SANTOS
Vicepresidente de la República

SABAS PRETEL DE LA VEGA
Ministro del Interior

EDGARDO MAYA VILLAZON
Procurador General de la Nación

VOLMAR PEREZ
Defensor Nacional del Pueblo

Referencia: Nuevo Crimen en el Ariari

Reciban un respetuoso saludo.

Nuevamente en sus despachos nuestra Censura ética pues durante 9 días, desde el 10 hasta el 18 de julio, policías contraguerrilla hicieron presencia en el casco urbano de Medellín del Ariari, mientras algunos “civiles” armados de la estrategia permanecieron en el lugar, reteniendo al campesino EDGAR PALACIO, a quién posteriormente asesinaron, sacándolo del corregimiento en medio de los controles policiales y los militares.

Nuestra Constancia Histórica ante el cinismo institucional. Los paramilitares jugaron fútbol con la policía, luego de realizar un censo de población y solicitarles a los pobladores denunciar las estructuras paramilitares. Y como parte de esta historia novelesca, al iniciar la presente semana las unidades policiales se retiraron de Medellín del Ariari, pero se fortaleció la presencia parainsitucional que nunca desapareció del poblado, mientras las autoridades policiales allí estuvieron, un intento de discreción fallido.

Aquí un perfil de los hechos

* Domingo 10 de julio, a las 10:00 a.m. “civiles” armados de la estrategia paramilitar, se llevaron por la fuerza al señor EDGAR PALACIOS del casco urbano del municipio de El Castillo. Los paramilitares lo subieron a un vehículo de servicio público y lo llevaron hasta el casco urbano de Medellín del Ariari donde lo ocultaron en una vivienda.

A las 8:00 p.m. los paramilitares sacaron EDGAR PALACIOS del casco urbano de Medellín del Ariari, lo subieron a una camioneta tipo estacas que se dirigió hacia el puente sobre el Río Cumaral.

Desde el atardecer, la policía Nacional estableció varios retenes dentro del perímetro urbano de Medellín del Ariari, solicitando documentos a los pobladores, otros se apostaron en el Coliseo, en una de las esquinas del corregimiento y en una casa vacía a la salida del pueblo, mientras los “civiles” armados de la estrategia paramilitar continuaron movilizándose a la vista de todas las autoridades.

Las unidades policiales contraguerrilla iniciaron un censo casa por casa, registrando nombres, documentos de identidad, preguntando los nombres de personas que los frecuentan. En ningún momento las autoridades realizaron acción alguna contra de los “civiles” armados de la estrategia militar encubierta quienes permanecieron en Medellín del Ariari.

Entre tanto, las Fuerzas Militares se ubicaron desde las 10:00 a.m. hasta cerca de las 9:00 p.m. en la carretera que conduce de Medellín del Ariari al casco urbano del municipio de El Castillo, en el caserío Malavar, por donde los paramilitares pasaron con el campesino EDGAR PALACIOS

* Lunes 11 de Julio el cuerpo sin vida de EDGAR PALACIOS fue encontrado en el solar de la una vivienda al lado izquierdo del puente sobre el Río Cumaral, ubicado a 5 minutos del casco urbano del corregimiento de Medellín del Ariari.

Este mismo día, en horas de la mañana en el casco urbano de Medellín del Ariari las unidades policiales convocaron a una reunión en la que manifestaron que venían a protegerlos, que era necesario que la comunidad denunciara a los paramilitares. Aunque varios paramilitares salieron del poblado, otro grupo de ellos permaneció entre ellos los que ejercen el control sobre las actividades comerciales y entre ellas la de la coca.

Dos días después, el miércoles 13 de julio, a las 9:00 p.m. , los paramilitares, entre ellos uno llamado ONESIMO, apodado el “paisa” jugaban fútbol con las unidades policiales acantonadas en Medellín del Ariari.

Este mismo miércoles, 6.30 a.m. un hombre vestido de camuflado fue hallado asesinado, a unos 500 metros del sitio conocido como Tres Esquinas, a 15 minutos del casco urbano de Medellín del Ariari. Los afectivos regulares que se encontraban en el lugar de los restos, se burlaron permanentemente de las víctimas. Los pobladores de la región, desconocen la identidad del asesinado.

* Lunes 11 de julio, en el caserío de Malavar, a 5 minutos de Medellín hacia las 10:30 p.m. de este lunes, unidades militares del Batallón 21 Vargas, llegaron a la casa del poblador FELIX GUTIERREZ GONZALEZ, luego de encañonarlo y esposarlo, sin presentar ninguna orden judicial de detención, se lo llevaron en la sede del batallón 21 Vargas en el municipio de Granada, en donde permaneció durante 12 horas.

De allí el campesino fue trasladado a la cárcel de Granada

Al campesino, un activo creyente de la iglesia católica, le quitaron su biblia, que quería llevar consigo.

Martes 12 de julio mientras la familia visitó a FELIX, un soldado les expresó: “cuídense, de esos extraños, que van por allá a nombre de la iglesia, ellos pueden ser los responsables de la caída de su marido”.

El militar al parecer se refirió a las actividades pastorales que se desarrollaron con motivo de la tradicional Fiesta de la Virgen del Carmen.

* Lunes 18 de julio, las unidades policiales que permanecieron por espacio de 9 días en el casco urbano se retiraron en horas de la noche, mientras las estructuras de “civiles” armados de la estrategia paramilitar permanecieron en el lugar y se fortalecieron desde el siguiente día.

Nuestra Constancia ante este nuevo caso, que expresa que desde enero del 2002, cuando hemos documentado uno y otro hecho, nada absolutamente nada se ha hecho, ahora, estamos en una etapa de cinismo. Nada hace creíble que no existen vínculos entre la institucionalidad y las mal llamadas Autodefensas, por eso, es mejor hablar de parainstitucionalidad. Un nuevo crimen, un nuevo asesinato a la vista de todas las autoridades. La ceguera institucional no corresponde con la visión ciudadana. No hay autoridad hay distorsión de la autoridad, hay erosión, y esa destrucción genera el silencio, el terror, pues hablar mata, callar salva. Un nuevo crimen en el simulacro de la desmovilización paramilitar, en el juego discursivo del cese de hostilidades. Controles absolutos, sin tacha moral, sin reparo unidad de acción, hasta es posible jugar el fútbol. Ya nada escandaliza, nada se disimula, pues todo el mundo sabe que es verdad, qué es así, qué es la nueva ley.

Nuestra Censura Moral pues estamos asistiendo a la erosión del Estado de Derecho.Al lado, del Crimen burdo y sin recato de conciencia, la judicialización el otro mecanismo de la seguridad de los criminales, no de las víctimas. Pero todo en su conjunto muestra que el Estado es de Hecho. El Estado de Derecho es una expresión en los documentos de Derecho. La ley de “justicia y paz” se avisora frente a estos casos como la consagración de la iniquidad, como si fuera lo bello, lo justo y lo sensato. El cese de hostilidades, nuevamente incumplido, como la desmovilización, y la ley de “justicia y paz”, que se anuncia, los hará hombres nobles, víctimas y porque no santos y hombres virtuosos

A ustedes nuevamente nuestra apelación a que se actúe eficaz, diligentemente a fin de evitar nuevos daños irreparables a la vida e integridad personal, lo que supone un cumplimiento irrestricto de las Recomendaciones de la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, la respuesta integral a las medidas cautelares resueltas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos a la Comunidad Civil de Vida y Paz.

Sabemos que las investigaciones desarrolladas frente a más de 200 crímenes cometidos desde el 2002 en el Ariari y más de 7 desplazamientos colectivos, que hemos documentado, sin contar, los desplazamientos familiares se encuentran en absoluta impunidad, y la misma ley de “justicia y paz” será otro mecanismo para la impunidad. Por eso, resta esperar que algún día la conciencia de la humanidad, la conciencia de nuestra Sociedad se erige desde los resortes de su eticidad para exigir justicia, y sancionar el conjunto de responsabilidades frente a estos Crímenes de Lesa Humanidad y violaciones de Derechos Humanos.

En nombre de la generosidad humana y de las fibras intimas de nuestras humanidades, actúen, no más crímenes, no más terror.

Con profundo dolor de nación,

COMISION INTERECLESIAL DE JUSTICIA Y PAZ