Informe – Crítica situación de violencia en Buenaventura.

Continúan graves hechos de violencia contra la población civil y crece la incertidumbre por el avance de la paz urbana en esta ciudad ante la espiral creciente de asesinatos y rondas de sujetos armados en distintos barrios del puerto.

Ante la delicada situación que se viene incrementando en los últimos días, la población se encuentra sumida en el desespero, el temor y la desesperanza.

El sábado 20 de abril, nuestra Comisión fue enterada de un atentado ocurrido hacia las 8:50 p.m, frente a la academia de vigilancia ATS, cerca de la entrada del barrio San Luis, comuna 7, dos sujetos que se movilizaban en motocicleta dispararon contra un hombre que se encontraba en el lugar. Esta persona quedó gravemente herida y fue trasladado a la clínica reina Sofía, su pronóstico es reservado.

Este mismo día, en horas de la tarde en el barrio Kennedy de la comuna 7, tres personas resultaron heridas con arma de fuego, en una acción dirigida desde una motocicleta por dos hombres. Las víctimas afrodescendiente son un hombre de 44 años y dos menores de edad, una niña de 5 y un niño de 12 años, quienes fueron trasladados a la clínica Santa Sofía del Pacífico.

El lunes 22 de abril, hacia las 7:35 am, el cuerpo sin vida de un hombre con impactos de arma de fuego fue encontrado en la calle Mazamorra del barrio san Luis, comuna 7.

Siendo las 8:45 p.m. del mismo día, nuestra Comisión recibió información sobre la presencia de sujetos armados que rondaban las calles de algunos barrios de las comunas 1, 2 y 3 de Buenaventura, lo que generó pánico y angustia en la población por lo que debieron encerrarse en sus viviendas. Cabe anotar que en este perímetro se encuentra el Espacio Humanitario Puente Nayero cuya población es beneficiaria de medidas cautelares de la CIDH.

Buenaventura enfrenta un recrudecimiento de la violencia, entre otros factores, por el ingreso de estructuras armadas que se proponen entrar en la disputa territorial por la zona, lo que en consecuencia, incrementaría las acciones de control y violencia elevando el riesgo a la vida e integridad de los pobladores civiles.

Reiteramos el llamado al gobierno nacional en cabeza de la OACP para que asuman con responsabilidad el espacio socio jurídico abierto en Buenaventura, avance en la concreción de salidas que salven vidas y detengan la degradación, pérdida del valor y sentido de la vida de una generación de niños y jóvenes en manos de la violencia.

Nos unimos a la profunda preocupación de las comunidades por lo que representa el abandono a esta iniciativa de paz urbana y al desangre de una ciudad que ha estado sumida en una espiral de violencia continuada. Si hay voluntad

política desde el alto gobierno es posible evitar que muchas vidas, especialmente de jóvenes continúen segándose.

Con indignación y dolor de patria.

 

Comisión Intereclesial de Justicia y Paz.

Bogotá D.C.

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