Nuevos asesinatos en Puerto Caicedo

“Nos empujan con el yugo al cuello, nos fatigan sin darnos descanso. Unos esclavos nos pretenden someter y nadie nos libra de su poder. No respetaron a los ancianos; forzaron a los jóvenes a mover el molino, ha cesado el gozo del corazón las danzas se han vuelto duelo” Lamentaciones 5


RESUMEN

DETALLES

* Miércoles 18 a jueves 19 de agosto, “civiles” armados de la estrategia paramilitar asesinaron a JESUS RAMIRO PAPA VASQUEZ, EFREN BUAENERGE LARA, de 68 años de edad, WILSON MARTINEZ, RODRIGO PALACIOS y a JOHN CARLOS OSSA, el primero presidente y el segundo secretario de la Junta de Acción Comunal – JAC – de la vereda Nueva Esperanza del Valle del Guamuez. Herido EDINSON RAFAEL PALACIOS de 16 años de edad. Cinco campesinos se encuentran desaparecidos. Las victimas fueron decapitadas y golpeadas con hachas, sus cuerpos quedaron en diferentes sitios entre las veredas Nueva Esperanza, La Esmeralda, Las Malvinas y en Guadualito jurisdicción del Valle del Guamuéz. En el operativo varias viviendas fueron quemadas.

Aproximadamente 200 “civiles” armados de la estrategia paramilitar llegaron a los poblados La Libertad, La Esmeralda, provenientes de El Tigre y el corregimiento El Placer transportándose en unos seis camiones que pasaron por el municipio de La Hormiga para dirigirse hacia La Libertad (jurisdicción del Valle de Guamez?) los paramilitares llegaron con lista de nombres, con la cual fueron ubicando a los campesinos asesinados.

Durante la permanencia en el poblado los paramilitares amenazaron a la comunidad de La Libertad, al igual que a los habitantes de los caseríos de Campo Quemado y la Esmeralda. Los paramilitares prohibieron a los familiares de las víctimas recoger los cadáveres, amenazando con tomar represalias contra aquellos que lo hicieran o denunciaran lo sucedido.

Al tiempo que sucedía el asesinato de los campesinos, en la zona había presencia de tropas del ejército, las cuales habían pasado durante esa misma semana por los caseríos de La Libertad, Campo Quemado, La Esmeralda y se encontraban ubicados en el sitio conocido como la ”YE”, en la vía que comunica el poblado de Guadualito, jurisdicción del Valle del Guamuéz, a una distancia no mayor de 15 minutos de la vereda la Esmeralda. El ejército también tiene presencia permanente en Pozo Quinde.

El ejército está obligando a los pobladores, especialmente a los presidentes de las Juntas de Acción Comunal a dirigirse a las bases del ejército con el fin de participar en reuniones donde se les solicita entregar copias de las listas de nombres de los campesinos miembros de cada una de las Juntas de Acción Comunal, diciéndoles que aquellos que no aparecieran en los listados eran entonces posibles guerrilleros y podrían ser detenidos en los retenes del ejército en la zona.

A los presidentes de Juntas de Acción Comunal que se resisten a entregar los listados de los campesinos miembros de su organización, los señalan como milicianos o auxiliadores de la guerrilla.

El ejército en las mismas reuniones, informa a los pobladores que su presencia tiene como objetivo cuidar la infraestructura petrolera y en el caso de la población, dicen que estos deben familiarizarse con el ejército así como antes lo hacían con la guerrilla y al que no le guste pues se puede ir, que la presencia de la gente no es necesaria ya que se puede repoblar con gente que si quiera trabajar con el ejército… así mismo expresan que ante la corrupción administrativa que ha vivido el departamento del putumayo, de ahora en adelante es el ejército quien se encarga de la administración y ejecución de recursos, así que ustedes deciden si están con nosotros o no.

* Domingo 26 de septiembre, hacia las 9:00 horas, incursionaron en la vereda Remolino Santa Ejlena aproximadamente unos 800 hombres vestidos de camuflado, con armas largas, con insignias del Batallón de Selva No. 20.

Seis de estos hombres llegaron a la casa de una familia campesina, solicitaron que les vendieran unas yucas, los uniformados llamaban a uno de ellos “mi teniente”. Cuando les trajeron la yuca cuatro de los armados se fueron y se quedaron dos, entre ellos al que le decían “mi teniente”.
“El teniente” le dijo a la mujer campesina que se encontraba en la cocina de la casa que ellos dos habían desertado de la guerrilla.
“El teniente” se dirigió a la campesina; “buenos días doña Sonia, ¿como ha estado? Con saludo de mano. Inmediatamente subió al segundo piso de la casa donde se encontraba MARINO URRESTE el esposo de la campesina. El campesino se encontraba en ropa interior, pues se había acabado de bañar, es abordado por “el teniente” quien le dice: “¿para donde va? Con que usted es el señor Luís Marino Urreste, el guerrillo”.

Luego “el teniente” le dijo a los dos campesinos: “cámbienme 10.000 dólares por pesos colombianos” a lo que el campesino respondió que no tenía ni un peso y que el no era ningún “guerrillo”, que buscara en toda la casa haber si encontraba algo que lo comprometiera como guerrillero.

“El teniente” encerró en una pieza al campesino sin dejarle mover mientras requisaba la casa. “El teniente” les preguntaba: “dónde tienen las armas?” . Después de revisar gran parte de la casa dejaron salir al campesino, lo sentaron junto a ellos y “el teniente” empezó a decir: “A nosotros nos dieron que ustedes son guerrilleros, de que usted señor Luís Marino cobra $ 50.000 mensuales a cada persona de la vereda, que usted no trabaja y que vive solamente de lo que le cobra a la comunidad”. El campesino dijo a “el teniente” que si quería hiciera una reunión con toda la gente de la vereda, que trajera al presidente de la junta, que el se atenía a lo que la comunidad le dijera a ellos.

“El teniente” le respondió: “Dejemos eso así, lo que pasa es que a ustedes los han mal informado, solamente es una mala información de un muchacho miliciano que se entregó el sábado 25 de septiembre en la vereda de granada” ( sitio que queda a dos horas por agua, en motor de la vereda Remolino Santa Elena)… “Les recomiendo que pongan mucho cuidado porque van a venir los grupos de paramilitares y por esa información les puede pasar algo”.

“El teniente” les dijo también: “viene un barco que ya está por llegar al amazonas, viene con ejército malo. También junto al barco viene un planchón lleno de ejército. Mientras estemos nosotros no va a pasar nada, pero cuando nos vayamos puede pasar algo grave”.
La campesina le dijo a “el teniente” que ella quería anotar esos datos, a lo que el armado dijo que esos datos no los anotara.

En esta misma vereda, Remolino Santa Elena, el mismo domingo 26 de septiembre, este teniente llegó a la casa del campesino EVER OBANDO, con el supuesto informante cuyo apellido es “YAHIGUAJE”, quien llevaba cubierto el rostro con un pañuelo verde.

Cuando llegaron a esta casa, el informante se quitó el pañuelo que le cubría el rostro y se dirigió a los campesinos que se encontraban en la casa (7 personas): “miren, ustedes saben quien soy yo”. Los campesinos respondieron que ellos no sabían quién era él.

Este informante en otros sitios ha colocado en peligro la vida de varios campesinos, como también de algunas pertenencias de la gente de la región. En granada iba a hacer asesinar a tres personas sindicándolas de ser auxiliadoras de la guerrilla. En este mismo lugar hizo quemar las mesas de billar y el equipo de sonido de un establecimiento sindicando a los propietarios de ser colaboradores de la guerrilla.

En este momento se tiene conocimiento que este informante hace parte de las estructuras paramilitares que operan en la región, lo han manifestado sus propios familiares que viven en Nariño y en algunos sitios de la región del Putumayo.

Después, este mismo domingo 26, los militares se dirigieron al cabildo indígena SIONA Bajo Santa Elena, comandados por el mismo teniente y con el informante en busca de tres milicianos indígenas. Al llegar al resguardo, solo encontraron a una de las personas que buscaban, lo iban a detener, pero la gente del cabildo no lo permitió. El teniente les había dicho que esa comunidad era una partida de alcahuetas de la guerrilla.


Algunas situaciones de la comunidad Siona:

El ejercito hace presencia aproximadamente desde marzo de este año en la zona, se calcula que unos 800 hombres fuertemente armados del BATALLON DE SELVA (creo que es el No. 20) están en constante movilidad sobre el territorio. Ante la presencia oficial de este batallón de selva muy cerca al cabildo indígena, el último sábado de mayo (que corresponde exactamente al día 29) un grupo de paras entre quienes iba una persona encapuchada que hacía de informante, se instaló en el resguardo, llevaban a cuatro civiles retenidos. Ahí en el resguardo retuvieron a un padre de familia de apellido Murcia, a este señor al cabo de dos días lo dejaron en libertad. Los paras dejaron libres después de cuatro días a los cuatro civiles que habían llevado con ellos.
El tiempo de permanencia en el resguardo indígena por parte de los paras fue de cinco días, tiempo en el cual robaron alimentos y algunos enceres de la comunidad.

Ante esta situación, la gobernadora del cabildo recomendó a la comunidad no salir a los trabajaderos por temor a que le ocurriera algo a cualquier persona. Pues la gente atemorizada no se percató a que hora habían salido de la comunidad. Al no notarse presencia de estos sujetos el día lunes 31 de mayo la gente de la comunidad salió a trabajar y mandar sus hijos a la escuela; pero también varias familias estaban pensando desplazarse hacia los lados del Ecuador porque temían que algo les ocurriera con la presencia de esta gente en su comunidad. Cuando estaban en ese movimiento fueron sorprendidos por 25 paras quienes rodearon el caserío, apuntaban con sus fusiles a la gente de la comunidad, mas o memos durante diez o quince minutos, tiempo en el que salieron. Dijeron nada a la comunidad que estaban haciendo. Un motorista que se aprestaba a salir fue detenido con amenaza de dispararle sino se detenía, lo obligaron a

Transportarlos le dijeron: “ así como colabora con la guerrilla, tiene que colaborar con nosotros”.

Denuncia la comunidad indígena que el “Ejercito” llega a su comunidad y las casas que están desocupadas las saquean. Que en este momento el ejercito cuenta con unos 800 hombres que están llegando a las veredas de: Lisberia, Remolino Santa Elena, Bajo Santa Elena Resguardo Siona, Pñuña Blanca Resguardo Siona, Puerto Principe sitio en el cual están acantonados las pirañas, los cañoneros y los remolcadores.

En Piñiña Blanca Hubo enfrentamiento entre el ejercito y la guerilla de las FARC, dentro de la comunidad, colocando en riesgo la vida de los niños que se encontraban con su profesora en clase (creo que hay una confusión en la hora se dice que a las 6pm, meter porfa, mira en tus apuntes). Las personas dicen que este enfrentamiento fue mas o menos por la fecha del día de la madre y que el ejercito cuando iba ingrsando a la comunidad un militar dijo a un niño: si ustedes no nos cuentan nada de la guerrilla les vamos a mandar a los paras que esos si son hombres malos.

La guerrilla se moviliza constantemente por la región.
La comunidad Siona está a punto de desplazarse por temor a la difícil situación que se vive en la región.

La comunidad necesita urgentemente ayuda humanitaria, en este momento tienen suspendidas prácticamente todas las labores comunitarias de trabajo por la constante presencia del ejercito en su resguardo.

* Lunes 25 de octubre, en la población El Picudo, jurisdicción del municipio Puerto Caicedo, inspección El Cedral, “civiles” armados de la estrategia paramilitar comandados por “BOQUINCHE”, realizaron un retén durante varias horas. En este reten detuvieron a la señora ROSALIA BENAVIDEZ de 24 años de edad quien salía de su finca ubicada en Río Picudo Bajo con su niño de brazos hacia Puerto Asís

Luego de amenazarla y sindicarla de ser colaboradora de la guerrilla, la asesinaron degollándola y lanzada a un aljibe de una de las casas abandonadas en la finca Punto Azúl, del cual posteriormente fue sacada por que algunas familias da este caserío la solicitaron para enterrarla en el cementerio del Picudo.

Los paramilitares regalaron el niño a una señora, pero un familiar de la victima lo reconoció y fue recuperado por la familia

Al parecer en ese aljibe hay más cadáveres, pero este “BOQUINCHE” lo mandó tapar

hay una base militar del batallón Domingo Rico en Arizona a 2 kilómetros de donde retuvieron y asesinaron a la señora ROSALIA BENAVIDEZ con otras tras personas más.

Según algunos testimonios la gente esta muy intimidada por que este “BOQUINCHE” está protegido por miembros del batallón Domingo Rico de Villagarzón quienes lo llaman “mi teniente” y se le ha visto en la base de Arizona.

Informaciones del Putumayo recogidas los días 12, 13 y 14 de noviembre 2004

Las fumigaciones son indiscriminadas. Fumigan escuelas con niños dentro, que luego se enferman. Fumigan ríos, cultivos de pancoger,…cualquier cosa. Están fumigando para sacar a la gente, no para acabar con la hoja de coca. Si quisieran acabar de verdad con la hoja de coca, deberían de preguntar al campesino que conoce este cultivo, y él sabe como acabarlo sin nada de destrozo. Resulta que la hoja de coca es atacada por varias plagas, que le exigen al campesino fumigar con varios productos químicos para acabar con ellas. Dicen que para mantener un hectárea de coca, necesitan invertir medio millón de pesos en químicos (herbicidas, fungicidas, plaguicidas,…). Bastaría controlar y prohibir la entrada al país de estos químicos, para acabar con el cultivo de la hoja de coca, sin afectar a nada ni a nadie mas. El negocio de los químicos es así también muy grande, y estos como siempre los produce la Monsanto.

En la vereda San Isidro (La Hormiga) ya van 5 fumigaciones. Las casas están también averiadas por los enfrentamientos entre grupos armados. Allí están viviendo la situación mas angustiante, por que los paras están en la vereda desde hace un año y medio. Están en las casas de la gente. Construyen en sus patios cambuches y ponen minas manuales de tubos. Usan sus cocinas y todo lo demás. El año pasado, el mando reunió a la comunidad y les preguntó que dijeran como se estaban comportando, que quería recibir las quejas. Un líder de la vereda, Eugenio, habló y dijo varias cosas. Al día siguiente lo mataron en su casa. Después de llevar varios meses en su vereda los paras, la guerrilla los atacó con cilindros, que caían cuando precisamente la gente estaba en reunión obligada por los paras en el parque de la vereda. La gente corrió y los cilindros mataron varios paras, pero por suerte a nadie de la comunidad.

El acuerdo con Ecuador era que no podrían fumigar en una línea de 10 kilómetros antes de la frontera, para que así las fumigaciones no afectaran a este país. Sin embargo se están metiendo a fumigar incluso a territorio ecuatoriano.

Se está produciendo también la concentración en la propiedad de la tierra, por la extensión de los cultivos de palma. Los intermediarios visitan a los campesinos por las casa, les ofrecen plata y microcréditos engañosos, que conllevan embargos posteriores de la tierra, al no poder ser devueltos. Dieron plata hace dos años del Plan Colombia y ahora la están pidiendo al doble de intereses y embargando fincas a quien no puede devolverla. Las veredas Medellín y Santa María, ya están llenas de palma y tienen todas sus tierras en negociación con los empresarios. Y siguen comprando. Con las fumigaciones dejaron a los campesinos sin su economía tradicional, y ahora los campesinos venden a cualquier precio. Precisamente las zonas mas militarizadas son las veredas donde hay palma. La gente sale de las veredas cuando le ofrecen algo de plata, por que saben lo que viene encima: llega el ejército con la palma y detrás vienen los paramilitares.

Otro mecanismo de expulsión del campesinado es poner impuestos muy altos, que no les permiten trabajar. Esto viene de la mano del Plan Nacional de Desarrollo (Ley 812), que establece un alto catastro y altos impuestos para trabajar. Esta ley vincula la tenencia de la tierra a los programas empresariales, empujando a los campesinos a trabajar para las grandes empresas de monocultivo. Son las alianzas estratégicas, las mismas de las que habla el Plan Colombia.

La concepción del actual gobierno sobre el desarrollo rural, expresado ya en varias ocasiones por diversos funcionarios es la siguiente: vincularlo a la política de Seguridad Democrática, liberar tierras y vincular a los campesinos con las empresas y las fuerzas públicas.

Les han llegado varias propuestas de monocultivo, no solo la palma, sino también: palmito, pimienta, vainilla, caucho, cabulla,…Los comisionistas van por las casas de los campesinos con calculadora en mano, y le dicen lo que va a ganar con el monocultivo. Pero la gente sabe que sin autonomía alimentaria, no hay resistencia. El deterioro ambiental es fuerte con todos los monocultivos.

La guerrilla y los paramilitares han entrado en una competencia dura por comprarle coca al campesino. Cuando los paras pillan alguien que saben que vende a la guerrilla, le extorsionan con cantidades de dinero muy grandes.

En el suroriente del Putumayo los militares directamente están violando mujeres, y también violaron a un hombre.

El gobierno ha enviado ahora a la zona, los que llaman “sin rostro”, que son civiles en labores de inteligencia. Van con la cara descubierta. Les llaman “sin rostro”, por que no son de la región, son desconocidos allí. Llegan en carros blancos sin placas a Puerto Asís. Le han caído al padre Wilson, preguntándole cosas: “usted padre debe saber muchas cosas, cuéntenos”. Él dice que cualquier nombre que se les de a esos tipos, es condenar a muerte a la persona y que él hasta ahora ha logrado huirles. Se dedican a ir por las veredas con la armada y el ejército, a averiguar quien vive allí, que hacen, cuales son sus movimientos,…

Radio Sucumbíos de Ecuador reportó una masacre de 12 familias (otros dicen que habló de 34), en la vereda El Afilador, al lado de La Dorada. Salió en las noticias el 9 de noviembre, pero la masacre debió suceder como casi un mes antes. Paramilitares haciéndose pasar por un grupo de la guerrilla, llegan a una vereda, comen, conversan amistosamente, y luego matan a hacha y motosierra a todos los habitantes.

El caso de Sonia, la animadora de la parroquia de la vereda Remolino Santa Elena. Ella salió de la cárcel hace 6 meses. Su esposo tiene también orden de captura ahora. Las pirañas de la armada llegan continuamente y tienen que salir corriendo. Ya están muy asustados y muy mamados de la situación. Están pensando irse al Ecuador. Llegan con los sin rostro, y estos les dicen que les van a matar por que son guerrilleros. Incluso con la armada la relación parece ser mejor. Estos le han dicho a la señora, que no se preocupe que ellos saben que no es guerrillera, pero que se cuide de los sin rostro, que son sicarios. Estos han ido ya 4 veces a su casa y le tumban y revuelven todo. Parece que ahora hay cierta rivalidad entre la armada y los sin rostro. Cuando estos llegan se van los soldados.

La última vez que llegaron los sin rostro a la casa de Sonia (hace 15 días), uno le dice que aunque saben que no es guerrillera, pero se tiene que ir a Mocoa a hablar con su jefe, un tal Alexander, y que con él tiene que arreglar. Y le da un número de teléfono, que según el tipo es el celular de Alexander.
Wilson le aconseja que no vaya, que puede ser una trampa. Dice que intentará, con un funcionario de la Defensoría de Mocoa (que al parecer es la única persona del Estado de fiar en la zona), ver si se puede averiguar algo sobre el número de celular que la dieron.

El ejército no persigue a la guerrilla, sino que busca sacar a la gente con intimidaciones. En la misma vereda de Remolino Santa Elena, llega u grupo de la armada y pregunta a un promotor de salud, si había guerrilla por allí. El promotor dice que no, y al poco le cae un tiro a un soldado y le hiere, y es que la guerrilla estaba haciendo retén en un caño que cae al lado de la vereda. El grupo de soldados se emputan y le maltratan al promotor por mentiroso, pero no hacen nada por perseguir a la guerrilla, que sin ninguna prisa se internó al monte. Media hora mas tarde, los soldados vuelven a la vereda y dicen que van a buscar a la guerrilla y recorren una por una todas las casas de la vereda, cuando saben de sobra que los guerrilleros se habían ido monte adentro. Cuando el promotor sale al pueblo (Puerto Asís), le caen los sin rostro y le vuelven a maltratar.

En la vereda La Rosa, el presidente de la Junta de Acción Comunal, está también en la lista como guerrillero. No ha salido de su vereda en 3 meses. La historia fue que en esa vereda tienen una norma interna de, a quien incumple con la JAC, le ponen a embalastrar la carretera. Un vecino, que le tocaba este trabajo, aprovechando que la guerrilla tiene normas similares, le denuncia al ejército diciendo que es de la guerrilla.

En la vereda Puerto Bello, subiendo por el caño Piñuela Blanco, el ejército entró por el río y a la vez por la montaña. Llegan y roban todo a la gente, maltratan a todo el mundo, incluso a los profesores, tratando a todos de guerrilleros. El presidente procapilla de esta vereda, está también en la lista que llevan los soldados o los sin rostro. Cuando entra el ejército, entran preguntando por él directamente. Él sacó su pasado judicial y está bien, pero ejército le sigue buscando por que está en la lista.

En la vereda Agualongo, la armada se llevó a un muchacho indígena, diciendo que es de la guerrilla. Su familia vive al lado del río en la vereda y hay otros hijos que son profesores y otros que están estudiando fuera. A este muchacho, que era el único que vivía en la vereda con los papás, se lo llevaron hace dos meses, y dice la mama, que cuando llega la armada les pregunta por su hijo, y la dicen que lo tienen abajo en Puerto Ospina. La mama pregunta que se puede hacer para que el ejército se lo devuelva.

La gente del campo ya no salen al pueblo. En el filo del río, llegando a Puerto Asís, han desaparecido a mucha gente que venía de las veredas, y nadie sabe lo que ha sido de ellos. Este deterioro de la situación, en el campo lleva solo dos años. Si se nota lo del Plan Patriota. Antes la armada subía por el río una vez al año. Ahora está continuamente subiendo y bajando.

En Puerto Asís, la situación es mas grave y lleva mas tiempo deteriorada (desde hace 5 años). Allí los paras son dueños de todo y controlan todo. La propia iglesia tiene que tener mucho cuidado con lo que hace y dice. Todas las instituciones están infiltradas por los paras: la Fiscalía, el Hospital, y por supuesto todo el mundo sabe que el alcalde es para. A un coronel de la policía se le ve tomando tranquilamente con los paras, aunque en su discurso dice que quiere acabar con paras y guerrilla. Están matando mucho últimamente en Puerto Asís, por cuestión de vacunas, y también por que la gente los llama a arreglar problemas familiares. Por ejemplo, los paras mataron a una muchacha que trabaja en una casa de ricos, por que el marido estaba liado con ella. La esposa la mandó matar.

En la vereda Buena Vista están obligando a la gente a ser informante. Cuando la gente estaba pasando en cascos al lado de Ecuador, llegó la armada y casi los hunden. Retuvieron a un señor y lo obligaron a ser informante. La gente está entre la espada y la pared. Llega la armada y reúne a la gente, que tiene que ir a la reunión por obligación, sabiendo que la guerrilla está dentro del bosque. Luego llega la guerrilla y también llama a reunión obligada. Y siempre así.

Estuvo por allí Marta Fosch y la hablaron del tema del hospital. Resulta que en estos días de forma anónima, alguien ha sacado volantes con denuncias de lo que está pasando allí. Pero mas bien solo denuncian el tema de la corrupción que hay. Nombran toda la corrupción del Alcalde, del gobernador, de los administradores,…el alcalde quiere que el hospital quiebre.

La señora que está en la cárcel (la paraca alias “La Chiqui”, o la “la pequeñina”, que mataba a los campesinos en el hospital), parece que iba a salir de la cárcel el 5 de noviembre, pero no ha sido así. De cualquier modo, ella sale de la cárcel cuando quiere. Cuando sale va a Caicedo, que es donde tienen su base los paras. Y continuamente llama a la enfermera y a Harvey para presionarlos que declaren a favor de ella, que si ellos declaran a su favor, ella sale de la cárcel. “De ustedes depende si la sacan o no”, les dice también la fiscal. El abogado de La Chiqui es un señor llamado Carlos Arturo Vargas Vasto.

La enfermera se va a pensionar ya y quiere acelerar rápido los papeleos, para salir de ese infierno.
La fiscal que lleva ahora el caso de La Chiqui, es la doctora Rosa Eugenia Bengarides, y esta está citando a la enfermera, a que se presente con su cédula, a declarar.

Parece que a La Chiqui la detuvieron por que se entregó un paraco, Fulvio Hernán Mutis Bastidas, que la denunció. La denuncia la recibió una fiscal (doctora María Antonia), que parece ser fue la que hizo todo para que la metieran en la cárcel. Ella ahora se ha ido de Puerto Asís y parece que lo único que queda honesto en la Fiscalía, es una asesora de esta fiscal, pero que también se va a perder ante la salida de la cárcel de La Chiqui.
La Chiqui desde la cárcel amenaza que van a llegar 800 de los suyos y van a arrasar todo.

La excusa de las autoridades en Mocoa, es la de siempre, que no pueden hacer nada, por que la gente no denuncia.
Ahora en el pueblo están matando muchos comerciantes.

Mataron también a una señora, y a una muchacha, y a otra la dejaron parapléjica estando embarazada. El niño nació bien y la mama sigue parapléjica.

En otro caso, llegan los tipos a una casa buscando a un muchacho para matarlo. Al no encontrarlo, matan a la mama. En ese momento, estaba llegando el marido y ve lo que está pasando, y va a buscar al ejército. Otro día vio a uno de los que mataron a su esposa con los policías. Parece que los tipos iban a por el muchacho en venganza por que les habían metido a sus informantes en la cárcel. Ahora al muchacho y al tío los tiene el ejército. A la señora la enterraron el 31 de octubre. La detención de informantes de los paras, es un teatro de la policía, para decir que hacen algo.

Unos días antes, mataron a alguien allí al lado de la parroquia. Los tipos que mataron, ni siquiera se fueron, se quedaron allí tranquilamente. Llegó la policía y detuvo a 10 de los que se habían acercado a mirar, pero no a los asesinos, que seguían allí sin ningún afán. El asesinado se llamaba Fernando Galeano.

Unos días antes, a media hora de Puerto Asís en el cruce de Santa Ana con Mocoa y Orito, los paras detienen una chiva, y bajan al chófer y al ayudante que era su hijo. Los quieren obligar a que los llevan unas cajas. Al negarse, tumban al hijo y lo matan en el suelo. Tenía 13 años.
En un autobús grande, se suben los paras y le dicen a un señor que se baje. El señor se niega y los tipos suben a la cabina y lo matan allí a machetazos. Esto sucede en el pueblo. Todas estas cosas suceden en tan solo 15 días en el propio Puerto Asís.

Están también matando a muchos indigentes.

LINEAS DE INTERPRETACION
ANTECEDENTES

Aproximadamente en el mes de abril de este año se vuelve a reactivar la explotación del crudo en esta zona de Puerto Asís por parte del Consorcio Colombia-Energy, cuyas actividades se han visto afectadas por la quema de 5 vehículos y la muerte de un conductor el pasado 11 de agosto en el corregimiento de Puerto vega.

La fuerza pública Batallón Plan Especial Energético Vial No 11, ha hecho presencia en la vía que conduce de la cabecera municipal hasta el corregimiento de Teteyé frontera con el Ecuador específicamente en los pozos Killacinga, Piñuña y Kiriquinga en Teteyé , el pozo Quinde ubicado en la vereda Campo Alegre, el pozo Cuembí en Nuevo Porvenir y en el caserío de Puerto Vega.

Los operativos militares se llevan a cabo en los caseríos aledaños de la Libertad, La Carmela, Campo quemado, la Esmeralda y veredas vecinas.

La presencia del ejército ha ocasionado respuesta por parte de las FARC con hostigamientos a la Fuerza Pública y ataques a la infraestructura petrolera que a su vez trae consecuencias graves para la población civil que se ha visto atropellada por miembros del ejército en los operativos de persecución de los guerrilleros.

En esta amplia zona del municipio también encontramos el resguardo Nasa de Alto Lorenzó, las comunidades Nasa de La Libertad, el Palmar, La Italia y Las Delicias cuyas autoridades tradicionales, los Cabildos, han sido victimas de atropellos por parte de la fuerza pública.

La comunidad campesina en su afán de protegerse de los abusos cometidos por los grupos armados legales e ilegales y con el propósito de buscar solución a sus problemas sociales iniciaron hace poco más de un año la conformación de una organización popular denominada ACSOMAYO que reúne a 58 Juntas de Acción Comunal y cuya directiva ha sido señalada por la fuerza pública como insurgente.

Los sueños de estas comunidades son el logro de energía eléctrica para toda la región, la construcción del puente sobre el río Putumayo que hasta ahora los separa del desarrollo del municipio, la construcción y dotación de un hospital de nivel I que les permita atención digna en salud y la capacitación para adultos con énfasis en convivencia pacifica en las instalaciones del colegio agropecuario del Cuembí.

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También se generaron inquietudes respecto al compromiso social del Consorcio que adelanta la explotación del petróleo por que no han sido muy claros con la comunidad y tratan de dividir y por consiguiente debilitar la incipiente organización campesina al prometer recursos solo a las veredas donde están los pozos argumentando que si se amplía la cobertura los recursos no van a alcanzar para nada..

Cuando se inicio el acercamiento con la comunidad se realizó una asamblea amplia en Puerto Asís, donde participaron también las comunidades indígenas quienes exigieron que las regalías debían hacerse de acuerdo a la ley 141 de 1994 y la ley 756 de 2002, agregando a esto la orden de la Corte relacionada con los Uwa.

La representante del Consorcio solicitó que se hicieran reuniones separadas con los indígenas para lograr los acuerdos y que las reuniones con los campesinos se programarían con las Juntas. Estas reuniones se están haciendo casi en forma individual con los presidentes de algunas juntas sin que haya habido claridad en cuanto al manejo y aprovechamiento de los recursos que deben beneficiar la comunidad.

Bogotá, D.C., 4 de noviembre de 2004
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz