En medio de la militarización de la brigada XVII nueva actuación de tipo paramilitar niño de meses muere por desnutrición

“Por eso he dicho: ‘apártense de mí voy a llorar amargamente. No se empeñen en consolarme por la devastación de la hija de mi pueblo.’ Porque es día de perturbación, de extravío y de aplastamiento para el Señor” (Is 22, 4-5)


RESUMEN

Nuevas actuaciones dentro de estrategias armadas de tipo paramilitar se han dado entorno a la Zona Humanitaria “Pueblo Nuevo” en las que se pretende confundir, desestructurar e intimidar a los afrodescendientes, mientras que las versiones oficiales indican que en el Territorio Colectivo se mantiene el operativo militar de la Brigada XVII, iniciado desde el 26 de enero. Efectivamente, el 5 de marzo por espacio de 30 minutos en horas de la mañana ingresó un grueso grupo de paramilitares, a una Finca de propiedad familiar, perfectamente identificada, lugar exclusivo de la población civil, que fue violado nuevamente por las acciones militares encubiertas. Simultáneamente, en desarrollo de esas actuaciones armadas, varios afrodescendientes fueron retenidos, advirtiendo que requerían hablar con uno de los acompañantes de Justicia y Paz

Debido a que los operativos militares de efectivos regulares de la Brigada XVII desde hace mas de un mes se han orientado contra la población civil con el asesinato de PEDRO MURILLO ROMAÑA, torturas, saqueos, amenazas de muerte, los pobladores han dejado de trabajar regularmente, negándose su derecho a la alimentación, por esta circunstancia falleció el domingo 27 de febrero en el Territorio Colectivo del Jiguamiandó por desnutrición y ausencia de atención médica el menor de 15 meses MANUEL ENRIQUE MONTIEL MONTALVO. La situación en general para los campesinos de la zona se hace invisible pues se conoció que se inició el cobro extorsivo o de una vacuna a los pequeños campesinos de Belén de Bajirá por la producción de plátano.

A pesar de los Resolución de las medidas provisionales de la Corte Interamericana de derecho Humanos, en uno de cuyos aspectos se refiere a la Atención Humanitaria debida a la población de las Zonas Humanitarias, el gobierno Nacional a través de la Red de Solidaridad no ha ingresado a los lugares, desde hace mas de un año, a fin de constatar la grave situación humanitaria, la que se ha agudizado por operaciones militares regulares e irregulares que se han dirigido contra la población civil.

Las tres Zonas Humanitarias del Jiguamiandó son parte de las fincas perfectamente delimitadas, propiedad familiar que serían militarizadas de acuerdo con las declaraciones del Ministro de Defensa JORGE ALBERTO URIBE y el Presidente ALVARO URIBE VELEZ.

SOLICITUDES

Comunicarse con el vicepresidente de la República, Dr. FRANCISCO SANTOS tel /57 310 2389120 57 3107720130

Defensor del Pueblo WOLMAN PEREZ, Tel 57 310 817 30 19 info@defensoria.org.co

Ministro del Interior y Justicia SABAS PRETELT DE LA VEGA 57 3102389076

A fin de exigir

1. Urgente presencia de una Comisión Interinstitucional a las Zonas Humanitarias a fin de dar respuesta al compromiso asumido del 4 al 6 de febrero, de diagnosticar la situación de crisis humanitaria de los afrodescendientes en materia de alimentación, salud y gestionar la entrega de ayuda humanitaria a las comunidades del Jiguamiandó y familias del Curvaradó, para evitar nuevos daños irreparables como la muerte del niño MANUEL ENRIQUE MONTIEL por falta de alimentación.

2. Respeto a las tres Zona Humanitarias, ubicadas en propiedades familiares, dentro del Territorio Colectivo, con base en el derecho a la intimidad, a la paz de acuerdo con la Constitución y como lo resuelven las Medidas Provisionales de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

3. Adoptar las medidas administrativas y jurídicas a fin de evitar la expansión de la siembra de palma aceitera de modo ilegal en el Territorio Colectivo del Curvaradó y Jiguamiandó, que a la fecha de este informe sigue avanzando en dirección a la zona humanitaria de Nueva Esperanza

DETALLES

*Sábado 26 de febrero, hacia las 10:30 en una actuación de tipo paramilitar armados retuvieron a varios afrodescendientes de la Zona Humanitaria de “Pueblo Nuevo” que se encontraban en el trabajo de preparación de la siembra de arroz, a la margen izquierda aguas arriba del río Jiguamiandó. Los de la estrategia paramilitar preguntaron a los afrodescendientes por “ El indio”, al parecer refiriéndose a uno de los acompañantes de nuestra Comisión Justicia y Paz, que solicitó a los integrantes de la Brigada XVII, respetar la Zona Humanitaria, unos días atrás.

Los armados agregaron, “el indio es ese de afuera, que los dirige a ustedes”, los afrodescendientes les expresaron que ellos son una comunidad donde la que manda es la comunidad. Nuevamente expresaron: ” si ese que los acompaña, díganle que después volvemos que necesitamos hablar con él”.

Después del interrogatorio, los armados se dirigieron en dirección del antiguo caserío de Pueblo Nuevo, aguas arriba.

*Domingo 27 de febrero, en la zona humanitaria de “Bella Flor Remacho” en el Territorio Colectivo del Jiguamiandó, en la que habitan afrodescendientes y mestizos desplazados de la cuenca del Curvaradó, falleció el niño de 15 meses de nacido, MANUEL ENRIQUE MONTIEL MONTALVO por la falta de alimentación, y problemas de nutrición generalizada, como reportaron las promotoras comunitarias.

*Sábado 5 de marzo entre las 10:00 y 10:30 a.m. en una actuación de tipo paramilitar, un grupo de 30 hombres vestidos de camuflado con armas largas y cortas llegaron hasta el frente de la Zona Humanitaria de Pueblo Nuevo. Dentro de los armados dos tenían cubiertos sus rostros con capuchas. Los armados abordaron a los afrodescendientes de la zona humanitaria de Pueblo Nuevo que se encontraban preparando la tierra para la siembra de arroz. Preguntan afrodescendientes “dónde está el indio” los afrodescendientes aclaran que allí no hay ningún indio” Los armados insisten “ese que los dirige a ustedes” De nuevo los habitantes de la zona humanitaria precisan que a ellos nadie los dirige y siguen insistiendo ” si ese que los acompaña, díganle que después volvemos que necesitamos hablar con él”. Después del interrogatorio, los armados se dirigieron en dirección del antiguo caserío de Pueblo Nuevo, aguas arriba.

*Lunes 7 de Marzo, en horas de la tarde nuestra Comisión de Justicia y Paz fue informada que “civiles” armados de la estrategia paramilitar que operan en la localidad de Belén de Bajirá, en medio de una fuerte presencia policial y militar, en la semana inmediatamente anterior del 27 febrero al 5 de marzo, iniciaron un cobro de “impuestos” por cada caja de plátano a los pequeños sembradores.

LINEAS DE INTERPRETACIÓN

El asesinato de un campesino conocido como PEDRO MURILLO ROMAÑA, el 29 de enero, las torturas, tratos crueles e inhumanos, amenazas de muerte, saqueos de bienes, señalamientos y acusaciones a los acompañantes y ONG, y la participación de reconocidos paramilitares han sido los mecanismos y las técnicas usadas contra la población civil por parte de efectivos de la Brigada XVII en el Territorio Colectivo del Jiguamiandó. Las consecuencias de los operativos armados en la producción y recolección de los productos necesarios para el sostenimiento diario de las familias ha empeorado la ya grave situación humanitaria con consecuencias trágicas como las de la muerte de un menor.

La afectación psicológica de las familias, el temor a movilizarse por el río, los escasos recursos económicos ante la imposibilidad de cultivar con libertad, hace urgente el cumplimiento del compromiso gubernamental asumido en la reciente comisión interinstitucional del mes de febrero, de adelantar gestiones para la atención humanitaria a las familias de las zonas humanitarias. Mientras simultáneamente las siembras de palma aceitera crecen de modo ilegal e ilegítimo dentro del Territorio Colectivo sin que ninguna autoridad nacional ni local actúe a fin de evitar el arrasamiento forestal y la negación del derecho a la sobrevivencia y a la existencia de los afrodescendientes.

La connivencia vuelve a evidenciarse. La ausencia de actuaciones militares sobre la estrategia paramilitar que al menos, por pudor institucional, den la impresión de que son diferentes. Mientras se adelanta un intenso operativo militar regular reconocido por las autoridades del nivel nacional, se siguen presentando estas acciones encubiertas con hombres que actuaron una semana antes contra las zonas humanitarias y ahora con capuchas que hacen temer una posible actuación con consecuencias irreparables contra algún miembro de la comunidad o algún miembro del equipo misionero que hace acompañamiento en los lugares humanitarios.

Evidentemente, la militarización anunciada por el Ministro de Defensa, JORGE URIBE, y ratificada por el Presidente ALVARO URIBE, en el día de hoy, a las experiencias de paz en la región del Urabá Antioqueño y el Bajo Atrato Chocoano, como la de las Zonas Humanitarias, son una cortina de humo frente a los evidentes hechos, testimonios y casos sustentados de la actuación estructural de unidades militares / paramilitares contra la población civil; una cortina de humo frente a la negación de espacio de interlocución transparente entre las comunidades y el Gobierno Colombiano; una cortina de humo frente a la responsabilidad estatal en centenares de Crímenes de Lesa Humanidad cometidos contra los afrodescendientes del Jiguamiandó; una cortina de humo frente a la imposición de un proyecto agroindustrial como el de la Palma sustentado en el engaño, la mentira y la sangre, una cortina de humo frente a operaciones militares que no se han dirigido contra la guerrilla de las FARC. Hoy siguen siendo las víctimas de la guerra, los afrodescendientes.

Bogotá D,C 10 de marzo de 2005
COMISION INTERECLESIAL DE JUSTICIA Y PAZ