Representantes de Víctimas, solicitan condena a militares implicados en el asesinato de José Edwin Legarda, esposo de la líder indígena Aida Quilcué

Hoy, miércoles 2 de junio empiezan los alegatos finales por el caso del asesinato del esposo de la líder indígena Aida Quilcué, Edwin Legarda, en hechos ocurridos en la madrugada del 16 de diciembre de 2008, en el municipio de Totoro, departamento del Cauca, por parte de miembros del pelotón Galeón No 7 adscritos al Batallón José Hilario López del Ejército Nacional. Se espera que el día de mañana, jueves 3 de junio el juzgado emita el fallo final.


Miércoles 2 de junio de 2010, por Prensa – Colectivo

Indígenas | Cauca |

El juicio final que se desarrolla ante el juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Popayán, se desarrolla desde el pasado 18 de mayo y cuenta con la participación de una Misión de Abogados Sin Frontera Canadá – ASFC- quienes asisten como observadores judiciales, compuesta por Pierre Rousseau y William St-Michel, quienes tienen como objetivo supervisar el juicio que se adelanta por el homicidio de Legarda Vásquez, garantizar el respeto a los estándares de derechos humanos, los principios del debido proceso y garantías judiciales.

Pierre Rousseau, tiene una licenciatura en Derecho de la Universidad de Montreal y una Maestría en análisis y gestión de conflictos en la universidad Royal Roads de Victoria (Canadá). Fue fiscal por casi 25 años y Fiscal general de dos territorios canadienses: los Territorios del Noroeste y el Yukon. Luego fue encargado de programa en materia de justicia indígena en Colombia-Británica (Canadá). Es experto en materia de solución de conflictos interculturales y en justicia autóctona. William St-Michel, es experto en derecho penal internacional, miembro de la Colegiatura de Abogados de Quebec.

Esa madrugada del 16 de diciembre del 2008, en el sitio de san Pedro, corregimiento de San Gabriel, municipio de Totoro departamento del Cauca, se produjo la ejecución extrajudicial del comunero indígena Edwin Legarda, Vásquez por parte de los miembros del pelotón Galeón No. 7 adscrito al Batallón José Hilario López del Ejercito Nacional.

Al momento de los hechos José Edwin conducía la camioneta propiedad del Consejo Regional Indígena del Cauca – CRIC, y se dirigía en compañía de la indígena y coordinadora general del Hospital de Inza, Liliana Valdés Pena, a recoger a la entonces Consejera Mayor del Consejo Regional Indígena del Cauca –CRIC- Aida Marina Quilque Vivas, quien asistiría a la junta directiva de autoridades indígenas departamentales que se desarrollaría en el resguardo indígena de Togoima Municipio de Páez- Cauca , y que acababa de regresar de la ciudad de Ginebra – Suiza- después de haber participado en el examen periódico universal sobre Colombia en la sede de Naciones Unidas.

Tanto él como su esposa Aida, habían participado dos meses antes en la Minga de Resistencia Social y Comunitaria que adelantaron los pueblos indígenas en Colombia reclamado el respeto y garantía de sus derechos

Por el homicidio del líder indígena, el Fiscal 41 de la Unidad de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario de la Fiscalía General de la Nación, presentó escrito de acusación el 26 de mayo del 2009, ante el juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Popayán, contra, José Hilario López, Sargento Vice Primero Alexis Ramírez Vivas, Cabo Tercero Ejército Nacional Javier Adolfo Osorio Díaz Soldado Campesino Numar Armido Buitrón Cabezas, Soldado Campesino Lizandro Obando Caicedo, Soldado Campesino Javier Francisco Belalcazar Trochez, Soldado Campesino William Weimar Lemeche Hurtado, Soldado Campesino Andres Casso Chate, miembros del pelotón Galeón No. 7 adscritos al Batallón José Hilario López del Ejército Nacional, como presuntos responsables de homicidio en persona protegida por haber asesinado indiscriminadamente a un líder indígena.

Hasta el momento, en el transcurso del juicio, que se inició el pasado mes de enero, se han adelantado las pruebas solicitadas por el Fiscal 41, Manuel Guillermo Gómez.

Para la representación de Aida Quilcue Vivas y de su hija menor, en su condición de victimas dentro del proceso judicial que está a cargo de los abogados Omar Hernández Garay de la Asociación MINGA y Soraya Gutiérrez A, del Colectivo de Abogados “José Alvear Restrepo”, es claro que el crimen de José Edwin, no fue un crimen aislado, sino que se perpetró en un contexto de sistemáticas violaciones a los derechos humanos contra las comunidades indígenas del Cauca.

Efectivamente, este crimen se cometió mes y medio después que el presidente Álvaro Uribe Vélez, en el marco de la Minga de Resistencia Social y Comunitaria que se inicio en el mes de octubre del 2008, se reuniera en el resguardo de la María de Piendamó con las autoridades indígenas departamentales y nacionales, donde una de las voceras principales fue la líder Aida Quilcue Vivas.

Durante esta reunión no se lograron obtener compromisos por parte del Gobierno Nacional, lo que llevo a que las comunidades indígenas continuaran con una multitudinaria marcha pacífica que llego a la capital del país el 20 de noviembre del 2008 con más de 40 mil personas.

Posterior a la Minga se incrementaron las violaciones a los derechos de los pueblos indígenas en Colombia y particularmente en el Departamento del Cauca, entre estos el asesinato de Edwin Legarda Vásquez.