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Por la Vida! Acciones antimilitares contra Base de la OTAN

La Red de Alternativas a la Impunidad y a la Globalización del Mercado, se SUMA a las acciones antimilitaristas realizadas en Bétera (Valencia) – España, donde el sábado 20 de mayo, cerca de un centenar de manifestantes realizaron una inspección ciudadana a la bases militares de la OTAN de Bétera, con capacidad para mover en menos de cinco días a 20.000 unidades militares a cualquier parte del mundo.


La Red de Alternativas a la Impunidad y a la Globalización del Mercado, se SUMA a las expresiones de resistencia ante la militarización de la Vida y el territorio. Los manifestantes en Bétera, saltaron los alambres que bordean la base de la OTAN, ante la presencia de perros y fuerzas antidisturbios de la GRS y de la OTAN. Con pancartas y carteles, se expresó el rechazo a la militarización de la vida, del paisaje, de la conciencia. Con la siembra de algunos árboles en medio del campo de maniobras, se expresó el rechazo a la militarización de los territorios.

Mientras en Colombia el gobierno solicita su ingreso a la OTAN como parte de su estrategia política de seguridad ante el aislamiento internacional, en España, nuevamente y por cuarta vez, activistas por la vida realizaron acciones de objeción y desobediencia civil.

Un texto adaptado, una narración escrita y unas fotos de la actuación del pasado sábado ante una de las bases militares de la OTAN.

SUMATE a las acciones contra el militarismo armado y el de las conciencias

SUMATE a la solidaridad con las víctimas de guerras injustas y ocupaciones despiadadas

SUMATE a las exigencias de diálogo por la vida y el territorio

SUMATE a las ACCIONES ANTIMILITARISTAS en Bétera (Valencia)

Su + (SUMAS)=
SUMATE Red de Alternativas
A la impunidad y a la globalización del mercado

Fotos de la 4ª Inspecció Ciutadana

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Tomadas de Inspección ciudadana

20-M: 4ª Inspección ciudadana a la base de la OTAN en Bétera (Valencia).

NI VALLAS, NI FRONTERAS, NI BASES

Por cuarto año consecutivo, el sábado 20 de mayo, un equipo de inspectores ciudadanos salieron desde Bétera y se introdujeron a través de las alambradas en el recinto militar de la base de la Fuerza de Respuesta de la OTAN para exigir su cierre y reconversión social y ecológica, en el marco de un fin de semana de protestas contra los espacios militares.

Y así se anunció: «Aún no conoces TELEGUERRA? TELEGUERRA es la mayor cadena de guerra rápida y violencia a domicilio del mundo, y tiene una sucursal en Bétera desde hace poco. El próximo sábado 20 de mayo iremos a descubrir sus especialidades. Porque el secreto está en la base. ¿Te apuntas?». Esta fue la convocatoria de la 4ª inspección ciudadana a la base de la OTAN, que partió desde Bétera a las 11 de la mañana en rechazo a la guerra y el militarismo, y la reconversión para uso social y ecológico de éste y todos los espacios militares.
Los inspectores e inspectoras saltaron la valla que rodea la
base, en un gesto que desean que sea también de solidaridad hacia todas aquellas personas en cualquier parte del mundo que huyendo de guerras y pobreza saltan otras vallas, sean de agua o de alambre, en busca de una vida mejor. «Ni un palmo de tierra para alimentar unas guerras de las que ya todas las personas somos víctimas potenciales, vivamos dónde vivamos. Ni un palmo de valla contra las personas. Porque ninguna persona es ilegal.»

«El cuartel de la Fuerza de Respuesta de la OTAN en Bétera es una de las
partes más cercanas de esta maquinaria de guerra que queremos obstaculizar y por eso le hemos estado dedicando tanta atención en estos años». Se trata de una base capaz de dirigir una acción militar exterior de hasta 20.000 soldados en cualquier lugar del mundo en menos de cinco días. La misión principal de la base es dirigir acciones de la nueva fuerza ofensiva de la OTAN en cualquier lugar del mundo contra el “terrorismo internacional”, es decir, la misma excusa utilizada para bombardear e invadir Irak y Afganistán. «Esto nos mete a todos dentro de la guerra y nos convierte por tanto en objetivos de potenciales atentados.»

El llamamiento a realizar acciones noviolentas en bases militares, oficinas de reclutamiento, de fabricantes de armas o de entidades financieras que inviertan en la industria armamentística propone la abolición de los ejércitos para acabar de una vez con las guerras. El ingreso de inspectoras e inspectores dentro de la base de Bétera es una acción de desobediencia civil, y por tanto es ilegal. Sobre
el papel, se trata de un delito de “allanamiento de instalación militar”,
castigado entre 3 meses y 3 años de prisión. A ninguna de las casi 100 personas que han sobrepasado los límites del terreno del cuartel se les ha procesado. Solamente se han producido un par de multas por desperfectos en las alambradas. De hecho, existe jurisprudencia del Tribunal Supremo que establece que este tipo de acciones de desobediencia civil noviolenta no vulneran la seguridad nacional.

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«Ni un palmo de tierra para
alimentar unas guerras de las que ya todas las personas somos víctimas potenciales, vivamos dónde vivamos. Ni un palmo de valla contra las personas. Porque ninguna persona es ilegal.»

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