Aclaración del DeVer 588

El martes 6 de octubre, nuestra Comisión de Justicia y Paz, escribió su DeVer 588 titulado CI Banacol persiste en su pretensión de control territorial en Curvaradó.


La introducción fue escrita por nuestra organización a propósito de un derecho de petición escrito por los integrantes de los consejos menores de Curvaradó y Jiguamiandó que habitan en las Zonas Humanitarias al Ministerio de Agricultura.

El primer párrafo ubica la referencia de circunstancias de modo y lugar de una reunión realizada el 2 de octubre, en la que participaron instituciones, organizaciones y empresas bananeras.

En ningún momento el alcance del escrito pretende asociar a las organizaciones sociales nombradas como parte de una estrategia criminal paramilitar.

El segundo y tercer párrafo hace alusión específica a la situación de no restitución y a las operaciones empresariales y su asociación al paramilitarismo sustentado en diversas fuente

Hemos conocido recientemente que se ha interpretado este texto como un señalamiento a personas, o a organizaciones, lo que no es cierto. Quiénes al parecer lo están haciendo así pretenden justificar divisiones e incluso injerencias armadas en los procesos de organizaciones comunitarias.

Objetamos el uso de nuestro escrito como justificador de señalamientos o acusaciones sin fundamento contra integrantes de la comunidad de Cetino o de Ascoba.

En la actualidad, ayer, hemos conocido que circulan versiones, según las cuales, la guerrilla de las FARC EP han amenazado a líder afrocolombiano LUIS ALBERTO RENTERíA.

Rechazamos esta amenaza, exigimos a la guerrilla de las FARC EP acate las normas del derecho humanitario y sus postulados de una ética revolucionaria.

Exigimos al gobierno colombiano adoptar sin dilación alguna las medidas necesarias para proteger la vida e integridad de LUIS ALBERTO RENTERÍA y de cada una y uno de los integrantes de los consejos menores que exigen la restitución plena de sus derechos al territorio.

Ver DeVer 588 del 6 de octubre de 2009

Bogotá, D.C. junio 4 de 2010

Comisión Intereclesial de Justicia y Paz