Saludo 2013 de la Comisión de Justicia y Paz

La cotidianidad se envuelve en estos días de un comienzo y un fin. Horas colectivas en las que las sombras del pasado nos conducen a percibir un futuro distinto o arrastrar con pesadez lo no vivido.


Pasa la vida entre la fragilidad, la muerte, los deseos sin retorno, los hechos deshechos, la incertidumbre del paso del tiempo, la angustia por un planeta en crisis, un mundo de injusticias creciente, las lágrimas, las sonrisas o un no más, abandonar o seguir… Pasa la vida en la indiferencia de las mayorías que sobreviven día a día en la fatiga de un pan que se ofrece como único tesoro necesario o de almas negadas a vivir en libertad, sometidas sin sentirse esclavas a la invasión mediática, al consumismo, nueva palabra de la democracia. Comenzamos otro año, para nosotros los 25 en este trasegar en búsqueda de nuestra propia dignidad, en construcción del sentido de la justicia y de la paz, a todas y todos, con quienes nos acompañamos en este tiempo en que la manipulación, la impunidad, la injusticia y la guerra toma nuevas formas las heterotopías no nos bastan pero nos animan a escribir, a desear un 2013 en el espíritu de los sueños de un digno existir, del presente futuro del por-venir, en la locura que algo nuevo sigue naciendo a pesar de todo.

Comisión Intereclesial de Justicia y Paz