Pronunciamiento público por Nueva amenaza de desalojo a los campesinos y campesinas de Guaimaro Magdalena por parte de la Policía Nacional y autoridades locales.

La asociación de campesinos desplazados y desplazadas de Guaimaro Magdalena ASODEGUMAG, la Asociación de Campesinos de Guaimaro, La asociación de mujeres campesinas Echadas pa lante y la organización de jóvenes campesinos; organizaciones de base de la CIC-ANUC-UR manifestamos:

Somos 300 familias campesinas en condición de desplazamiento, retornadas desde hace 2 años al corregimiento de Guaimaro, municipio de Salamina, departamento de Magdalena; En riesgo de ser desalojados del predio rural Villa Denis por parte de la administración municipal, regentada por el terrateniente y ganadero Pedro Pablo Asmar Amador quién luego de tres intentos de desalojo, realizados en Mayo 15, Junio 3 y Agosto 26, ha instaurado un nuevo intento para el día 27 de noviembre del año en curso. Esa orden va dirigida contra 300 familias campesinas que hemos vivido un proceso de liberación de la madre tierra, en el predio Villa Denis, predio que hemos rebautizado como LA TIERRA PROMETIDA.

Esta recuperación ha sido nuestra respuesta al proceso de corrupción y desconocimiento de nuestros de derechos por parte del INCODER, entidad que viene siendo investigada por la justicia debido a que desconoció nuestra condición como campesinos en situación de desplazamiento y víctimas de crímenes del paramilitarismo y en ese desconocimiento entregó este predio, en figura de testaferrato, a 27 personas que no son campesinos y ligados a la clase política de la región.

El procedimiento de desalojo del 27 de Noviembre fue ordenado por el Alcalde; en la antesala de la conmemoración de los 10 años de la masacre de Guáimaro el próximo 30 de noviembre; Masacre realizada por el Bloque Pivijay de las AUC en la que 7 campesinos fueron masacrados y de los cuales 6 de ellos aun están desaparecidos desde 1999. Este fue el inicio de una escalada de terror y violencia por parte de los paramilitares en la región en que selectivamente fueron asesinadas 48 personas del corregimiento.

Varias de las víctimas eran parte de las 50 familias campesinas poseedoras del terreno Playones de Laura y Castro y que por más de 12 años produjeron colectivamente; y que a partir de la masacre fueron obligadas a abandonar su predio. Este fue ocupado días después por parte del ganadero, terrateniente y ex alcalde Jorge Salah Donado quien hasta la fecha ostenta de manera violenta la posesión de los playones.

6000 habitantes todos campesinos y campesinas del Corregimiento fueron desplazados; los hechos fueron ampliamente difundidos por los medios de comunicación de la región y a nivel nacional. Siendo además victimizadas sus organizaciones de base, el sindicato campesino y la asociación de campesinos y pequeños productores. El accionar violento y criminal de los paramilitares contó con la complicidad de las autoridades locales.

27 de las 300 familias asentadas en el predio Tierra Prometida; éramos poseedoras de los playones Laura y Castro. En la actualidad somos más de mil familias campesinas retornadas agremiadas en 4 organizaciones que corremos el riesgo de ser revictimizadas.

Solicitamos a las organizaciones sociales, ONGs, organizaciones de derechos humanos y medios de comunicación, la solidaridad con La comunidad Campesina de Guáimaro e instamos al acompañamiento y seguimiento para el día 27 de noviembre, nuevo intento de desalojo y el 30 de noviembre en la conmemoración de los 10 años de la masacre.

Comunicado ANUC-UR