Plan para atentar contra la vida de líderes y lideresas de Curvaradó

El día de ayer, mientras se dirigía de Medellín a Bogotá, el líder James Ruíz recibió una llamada en la que le manifestaron que hombres armados lo asesinarían a él y a otros 29 líderes en Playa Roja, por ser “sapos del gobierno contra los empresarios” e igualmente le expresaron que “esa tierra no las van a devolver”.

James es reclamante de tierras, su padre y un hermano fueron asesinados en el año 2012

Semanas atrás empresarios ocupantes de mala fe amenazaron de muerte a Ledis Tuirán, lideresa de Caño Manso, quién con su familia se vio obligada a desplazarse. Los empresarios manifestaron que esta lideresa había sido una de las “sapas” que se colocó una máscara pero que ya la habían descubierto.

Ayer mismo, la lideresa Rosario Anaya, recibió información acerca de la orden de empresarios ocupantes de mala fe, para evitar su regreso a la propiedad abandonada desde diciembre pasado ubicada en Bijao Onofre,  Territorio Colectivo de Pedeguita y Mancilla. Cabe recordar que el pasado 20 de diciembre cerca de 30 hombres armados y vestidos de civil ocuparon la propiedad y amenazaron de muerte al hijo de la lideresa, ocasionando el desplazamiento de la familia. Al día de hoy se mantiene la movilidad regular de hombres con armas largas en la propiedad.

La nueva dinámica para asegurar el territorio por parte de los empresarios ocupantes de mala fe, comprende el rompimiento de las AGC y la creación de nuevas estructuras armadas de tipo criminal.

Bogotá D.C., 29 de enero de 2018

Comisión Intereclesial de Justicia y Paz