Padre Sergio Restrepo Jaramillo, S. J.

Asesinado el 1 de junio de 1.989

El 01 de junio de 1989, en Tierralta, departamento de Córdoba, “civiles” armados de la estrategia paramilitar, provenientes de la hacienda “Las Tangas”, propiedad de los hermanos Carlos, Fidel y Vicente Castaño Gil, en coordinación con el Capitán del ejército Comandante de la base militar acantonada en Tierralta y con la complicidad de los policías que prestaban su servicio en ese lugar, asesinaron al sacerdote Jesuita y vicario de la Parroquia de San José de Tierralta, Padre SERGIO RESTREPO JARAMILLO, S. J..

El Padre SERGIO llevaba 10 años trabajando en Tierralta y se había ganado la confianza de campesinos e indígenas de la zona, quienes le confiaban numerosas informaciones sobre las violaciones a los derechos humanos que sufrían. El Padre SERGIO había criticado numerosas veces el trato que los militares le daban al pueblo y había hecho pintar un mural en el fondo del templo, en cual se incorporó la memoria de las torturas y muerte que miembros del ejército le habían infligido al antiguo párroco de Tierralta, Bernardo Betancurt, quien al retirarse del sacerdocio permaneció viviendo allí y frecuentemente echaba en cara a la fuerza pública sus crímenes, por lo cual ellos lo trataban de “loco”.

Según pesquisas hechas por otros miembros de la fuerza pública, el mural fue lo que exacerbó a los militares hasta ordenar la muerte del Padre SERGIO, pues no soportaron que en el templo permaneciera ese memorial de su crimen. El mismo Obispo del lugar, dos días antes, recibió una advertencia del Comandante de la base militar de Tierralta sobre el mural, exigiendo su supresión, con el ultimátum: “órdenes son órdenes”.

Bogotá, D.C., 01 de junio de 2005

COMISION INTERECLESIAL DE JUSTICIA Y PAZ