José Nerito Rubiano Bariquí

El jueves 4 de abril de 2019, después de una larga enfermedad, agravada por la lejanía de su comunidad y las complicaciones para moverse en silla de ruedas, falleció JOSÉ NERITO RUBIANO BARIQUÍ, indígena Embera del Resguardo Humanitario y Ambiental SO BIA DRUA Alto Guayabal perteneciente al Cabildo Mayor Urada, Jiguamiandó.

Su espíritu emprendió su viaje al lugar de sus ancestros, al KATUMA JAIDE o el cerro sagrado, donde van quienes han sido víctimas de maldades y afectaciones por parte de personas ajenas a la comunidad, en este caso por bombardeos del Ejército Nacional en el año 2010.

JOSÉ NERITO fue arrancado de su casa y de su territorio, el sábado 30 de enero del 2010 a las 4:00 a.m. por los helicópteros y un avión Kafir de la Fuerza Aérea, que después de sobrevolar el área ametrallaron varias veces y descargaron 5 bombas alrededor y sobre la vivienda de la familia RUBIANO MAJORÉ, en la que se encontraban, además de JOSÉ NERITO, de 20 años de edad, su esposa MARTHA LIGIA MAJORÉ, CELINA MAJORÉ y los niños GIOVANNY de 9 años y un bebé de 20 días de nacido, quien murió el 19 de febrero de ese mismo año, por las afectaciones del bombardeo.

La operación indiscriminada y desproporcionada, dejó gravemente heridos a JOSÉ NERITO y MARTHA LIGIA, quienes fueron arrojados por el impacto a varios metros de la vivienda.

JOSE NERITO quedó parapléjico y obligado a usar sillas de ruedas, por eso no pudo regresar a su comunidad, a su SO BIA DRUA, al río Jiguamiandó, al cerro sagrado, vivió los últimos 9 años condenado al destierro, al exilio. El crimen sigue aún en la impunidad. 

JOSE NERITO se reencontró con sus ancestros asesinados y desaparecidos en el desplazamiento del año 2000, a los jóvenes que se suicidaron en 2007- 2008 cuando empezaron a escuchar que la empresa Muriel Mining iba a explotar al cerro sagrado y con los niños muertos este año en su comunidad victimas del confinamiento, el hambre y las enfermedades que vive la comunidad.

Que Karagaví, Dios de los Embera Eyábida, le conceda la armonía en el Pueblo de los Espíritus.

Imagen: Revista Semana. El Cerro Careperro, lugar sagrado para los Embera. Foto: Ramón Campos Iriarte