Seguimiento a defensores de JYP

Incidentes de seguridad de defensores de Justicia y Paz

Ayer jueves 4 de julio a las 7:00 p.m. entre Chontadural y Pavarando defensores de derechos humanos de nuestra Comisión fueron seguidos por una moto cuando se dirigían hacia Mutatá.

Los AGC instalaron un retén donde detuvieron el tránsito de vehículos y de personas. Revisaron varios camiones y amenazaron a algunos de sus conductores.

Luego de cruzar el retén los defensores de J&P fueron seguidos.

El pasado miércoles 26 de junio a las 9:00 a.m. el esquema de protección de la UNP, identificó el seguimiento a los defensores de J&P cuando se dirigían hacia Curbaradó desde Belén de Bajirá en el vehículo de protección.

El lunes 1 de julio a las 8:40 a.m. entre el punto conocido como Bejuquillo y Caucheras, el esquema de escoltas de la UNP, para nuestros defensores en Antioquia y Chocó, fueron seguidos por dos hombres en una moto Suzuki GSN150.

El vehículo de protección redujo la velocidad para que los hombres motorizados pasarán el vehículo. Los hombres esperaron más adelante y observaron el paso del vehículo de protección.

Minutos después en un trayecto de 4 km fueron seguidos y hostigados por los motorizados sobre la vía hasta el municipio de Belén de Bajirá.

En Bajirá los defensores  fueron observados en repetidas ocasiones por dos hombres diferentes. Uno de ellos se acercó a una defensora y le expresó: “estos no son”.

Estos hechos están antecedidos de presiones y amenazas de paramilitares de las AGC que han señalado que nuestra organización debe dejar de denunciar, indican que nos vamos o nos matan.

Desde febrero se conoce de la existencia de un plan de ataques contra nuestra Comisión de J&P, que incluye un ataque físico, montaje judicial y desprestigio con el propósito de minar nuestra credibilidad, asegurar negocios empresariales de diverso tipo en contra de los derechos de comunidades negras, indígenas y afromestizas, desconociendo derecho ambientales y directrices de ONU sobre empresas y derechos humanos.

Bogotá D.C., 5 de julio de 2019

Comisión Intereclesial de Justicia y Paz.