Colombianas y Colombianos por la Paz invita a las guerrillas y al gobierno a un Acuerdo Especial de Paz

Conforme al Derecho Humanitario, invitamos a la sociedad colombiana a sumarnos en una voz para llamar al gobierno y a las guerrillas a explorar un Acuerdo Especial que ambiente la voluntad real de paz, más allá de los avances que se expresan en la mesa de conversaciones en La Habana con las FARC EP y de las conversaciones que animamos se inicien pronto con el ELN.


Carta Abierta

Por expresiones humanitarias para la paz

La continuidad del conflicto armado arroja nuevas víctimas entre los civiles y el aumento del dolor en los propios combatientes y sus familias, situaciones que están generando dolor, zozobra, cansancio, incertidumbre y desesperanza.

Invitamos de manera urgente a un cese del fuego y al desescalamiento que debería expresarse junto a decisiones de responsabilidad ética, en gestos concretos para los afectados, las víctimas y la sociedad en su conjunto.

No se trata de una solicitud con miramientos políticos o electorales, se trata de principios éticos de aplicación concreta urgente, para que la sociedad colombiana pueda discernir entre el valor del diálogo para solucionar el largo conflicto social y armado o la continuidad del escabroso camino de una incruenta guerra.

Las consecuencias de las hostilidades son evidentes. Seguimos siendo el segundo país con más desplazados internos en el mundo, según un reporte internacional; nuevos informes de redes de organismos de derechos humanos grafican la continuidad de crisis de derechos humanos y de infracciones al derecho humanitario de todas las partes.

Hemos conocido del desplazamiento forzado en el sur del Chocó, de la muerte de dos niños participando en hostilidades en Tumaco; de la crisis humanitaria carcelaria de privados de la libertad en razón de su participación en el conflicto; del incineramiento de Marco Tulio Sevillano, conocido como Calidoso, en Bogotá, hecho en esclarecimiento judicial, pero reflejo de la intolerancia y de la sociedad que se pretende cimentar en odios, en deshumanización y crueldad.

El conflicto armado debe parar, la paz es un derecho, un Acuerdo Especial hará creíble el escenario de diálogo con las FARC y el que esperamos se inicie con el ELN; será el punto de partida para la posibilidad de construir una nueva democracia justa social y ambientalmente con los derechos de las victimas respetados en una sociedad con una cultura de paz y de inclusión.

Colombianas y Colombianos por la Paz