Cadetes de la Policía Colombiana se disfrazaron de Nazis en un acto cultural, lo que provocó indignación y una disculpa presidencial

Los cadetes de una academia de policía colombiana vistieron uniformes militares de la época nazi de Alemania y exhibieron parafernalia con la insignia de la esvástica durante un evento de intercambio cultural internacional, lo que provocó una indignación generalizada que llevó al líder del país a pedir disculpas.

El presidente colombiano, Iván Duque, condenó el incidente en la Escuela de Policía Simón Bolívar, escribiendo en Twitter que “es inaceptable cualquier manifestación que haga uso o referencia a símbolos alusivos a los responsables del Holocausto judío”.

La escuela de policía, situada en la ciudad de Tuluá, a unos 320 kilómetros al oeste de la capital, Bogotá, había elegido a Alemania como país invitado para su acto cultural, según la Agence France-Presse. Los medios de comunicación locales informaron de que las fotos publicadas en la página de Facebook de la escuela, que parecen haber sido borradas, también mostraban a un estudiante con un bigote similar al de Hitler.

Algunos observadores dicen que el incidente puede ser un síntoma de un problema mayor. La militarizada policía nacional de Colombia ha estado en el punto de mira en los últimos meses, con The Washington Post y observadores de derechos como Human Rights Watch detallando aparentes casos de uso excesivo de la fuerza contra manifestantes civiles.

Las autoridades detuvieron y acusaron a algunos agentes, al tiempo que atribuyeron algunos actos de violencia a personas que, según ellos, eran agitadores que se habían infiltrado en las filas de los manifestantes. Y el viernes, la policía nacional suspendió a dos oficiales superiores de la escuela de Tuluá.

“¿Qué clase de institución policial, qué clase de Estado no reconoce el fascismo, o peor, el nazismo?”, dijo Federico Finchelstein, académico de la Nueva Escuela de Investigación Social de Nueva York que estudia el fascismo en América Latina. “No tener ni idea es también parte de una ideología que es antidemocrática”.

Las embajadas de Alemania e Israel en Bogotá emitieron un comunicado conjunto en el que piden a Colombia que se una a la Alianza Internacional para la Memoria del Holocausto, una organización mundial que investiga el genocidio perpetrado por los nazis.

“Cualquier discurso de odio puede llevar a resultados trágicos como los que se vivieron hace años, durante la Segunda Guerra Mundial, donde fueron asesinados 6 millones de judíos, en el crimen más horrendo que se haya cometido en la historia de la humanidad”, dijeron las misiones diplomáticas.

En Colombia, que tiene una población de unos 50 millones de habitantes, viven unos 4.000 judíos. Pero hay un pequeño pero creciente número de judíos, a menudo cristianos evangélicos, que se han desprendido de sus doctrinas anteriores para practicar el estricto judaísmo ortodoxo. En noviembre, Duque también visitó el Centro de Memoria del Holocausto Yad Vashem durante un viaje a Jerusalén.

Según los observadores, las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra la multitud y golpearon a los manifestantes con porras. En los primeros cinco días de la protesta, murieron 18 civiles y un policía, y 87 personas desaparecieron, según el defensor del pueblo de Colombia.

Duque ha dicho que tiene la intención de reformar y modernizar la policía en un esfuerzo que incluirá medidas como la creación de una división de derechos humanos y el uso obligatorio de cámaras corporales.

 

Fuente: Colombia’s Ivan Duque condemns Nazi and Hitler symbols at police school – The Washington Post

Imagen: The Washington Post