Amnistía, denuncia “trato inhumano” infligido por las autoridades estadounidenses

Amnistía Internacional (AI) ha denunciado este lunes el “trato inhumano” infligido por las autoridades estadounidenses a Bradley Manning, el soldado norteamericano acusado de filtrar informaciones al portal Wikileaks, y ha advertido de que sus condiciones carcelarias son “innecesariamente duras”.

“Las condiciones infligidas a Bradley Manning son innecesariamente duras y suponen un trato inhumano por parte de las autoridades estadounidenses”, declaró la directora del Programa para las Américas de Amnistía Internacional, Susan Lee.

“Manning no ha sido declarado culpable de ningún delito, pero las autoridades militares parecen utilizar todos los medios a su alcance para castigarlo mientras se encuentre recluido”, prosiguió. “Esto socava el compromiso de Estados Unidos con el principio de presunción de inocencia”, agregó.

La semana pasada, Amnistía escribió al secretario norteamericano de Defensa, Robert Gates, para instarle a revisar las restricciones impuestas a Bradley Manning. Desde el pasado mes de julio, según la organización, Manning (de 23 años) permanece 23 horas al día en una celda escasamente amueblada en la que carece de sábanas, de almohada y de efectos personales.

“MÁXIMA CUSTODIA”

El pasado martes, Manning fue declarado en “riesgo de suicidio”, razón por la cual se le quitaron todas sus vestimentas, salvo la ropa interior, y se le confiscaron las gafas. Las medidas fueron retiradas dos días más tarde a causa de las protestas del propio soldado y de sus abogados.

Personajes destacados

• Robert Gates

Asimismo, Manning se encuentra en régimen de “máxima custodia” pese a no tener ningún antecedente de violencia ni de actos de indisciplina durante su periodo de detención, según AI. Ello implica que debe permanecer esposado de pies y manos durante las visitas y que no se le permite trabajar.

Aparte, el soldado se encuentra detenido en régimen de Prevención de Lesiones, pese a las recomendaciones en sentido contrario de un psiquiatra militar. En virtud de ello, está sometido a restricciones especiales y a inspecciones de los guardias cada cinco minutos.
Según Amnistía, todos los intentos de los abogados para que se le levanten estas medidas, que a su juicio carecen de justificación, han sido desoídos. “Las condiciones represivas impuestas a Manning violan la obligación de Estados Unidos de tratar a los presos con humanidad y dignidad”, advirtió Susan Lee.

Aparte, prosiguió la investigadora, “el aislamiento y el confinamiento prolongado en celdas” pueden “causar problemas psicológicos y socavar la capacidad de Bradley Manning para defenderse a sí mismo”.
En abril de 2010, la organización Wikileaks hizo públicas varias imágenes sobre un ataque efectuado en 2007 en Irak por los helicópteros Apache de Estados Unidos, que causó la muerte de dos profesionales de la agencia de noticias Reuters. El portal difundió posteriormente numerosas informaciones filtradas sobre las operaciones norteamericanas en Irak y Afganistán.

Manning fue detenido al mes siguiente y acusado de “transferir datos clasificados” y de “entregar información sobre defensa nacional a una fuente no autorizada”. El soldado se enfrenta a una posible condena de 52 años de cárcel.