Basta ya el asesinato de jóvenes

continúan los asesinato de jóvenes en los barrios populares de los cerros nororientales en la localidad de Usaquén, Bogotá

Hacemos llegar a ustedes, trabajadores, trabajadoras, educadoras populares, estudiantes, docentes, intelectuales, comunidades indígenas, campesinos pobres, mujeres del pueblo, artistas, pobladores barriales, sus organizaciones y el pueblo de Colombia en general, nuestra voz de auxilio, protesta, indignación y repudio ante la acción sistemática de descomposición, reclutamiento, represión y asesinato de nuestros jóvenes, a manos de bandas criminales, que vienen penetrando nuestros barrios populares desde 1997, pero que a partir de 2007 su acción se hace insoportable y aterradora, dejando en lo corrido de 2010, al menos un joven asesinado por semana.

Éstas organizaciones, avanzan hoy con el más podrido y flagrante Estilo Paramilitar, cultivando la “participación de la comunidad” en sus acciones, imponiendo el silencio forzado y facilitando la impunidad sembrando el terror, con amenazas, distribuyendo panfletos de “limpieza social”, tomándose viviendas, haciendo vejación de los cuerpos de sus víctimas, para “aleccionar” , imponer toques de queda, promover la retaliación y ofrecer finalmente “servicios de seguridad y vigilancia privada”.

Este nuevo poder criminal barrial hoy hace, con los mecanismos represivos referidos, control militar territorial y de población, “cuadra por cuadra”, teniendo como resultado el desplazamiento forzado, la ruptura del tejido social histórico de nuestros barrios, además de daños económicos, morales y pérdida de nuestra identidad popular, principalmente en los barrios Cerro Norte, Santa Cecilia Alta y Arauquita I y II sectores, dando paso ante los ojos y oídos atentos de nuestros jóvenes, niños y niñas, al Modelo Traqueto, modelo de vida gamonal proveniente de las empresas de exportación de cocaína, que a diario se legitima desde las zonas de guerra en Colombia y desde algunos medios masivos de comunicación y desinformación.

Tras 40 años en la dignidad popular, y el desarrollo de nuestro Territorio Cerros Nororientales de Usaquén, durante los que habíamos conquistado en nuestros barrios populares, además de seguridad jurídica, un entorno ecológico y ambiental más sano y más digno para nuestros niños y niñas, a partir de 2005, hemos venido sintiendo “pasos de animal grande”, que atentan contra nuestros derechos.

Mientras avanza la construcción de decenas y decenas de torres, edificaciones de lujo para los llamados estratos cinco y seis en los Cerros de Usaquén, y se habla del Plan de Expansión Norte, vemos para los barrios populares la arremetida o resurgimiento de la normatividad “conservacionista”, ejemplo EL MANDATO VERDE, promovido por la Contraloría Distrital , “Ni un ladrillo más en los Cerros Orientales de Bogotá” , en defensa de la integridad de La Reserva Forestal Protectora, situación que contradice los últimos sesenta años de flexibilización de las normas para el desarrollo urbanístico de ciertos sectores en Bogotá D.C.. Su aplicación en Usaquén resulta siendo un Reordenamiento Territorial clasista y excluyente. Todo esto parece engranar hoy por pura coincidencia con la campaña de las bandas criminales: “Ni una sola voz que se levante en los Cerros Nororientales de Usaquén”.


Pobladores de barrios populares de los Cerros Nororientales de Usaquén.

03 de Agosto de 2010.