ACNUDH, lamenta la muerte del Padre Gabriel Izquierdo

El padre Gabriel no escatimó un solo esfuerzo para defender los derechos de las víctimas, de los afrodescendientes, de los indígenas, de los campesinos y de toda persona que viera vulnerados sus derechos. El padre Izquierdo trabajó además de forma incansable por la paz a través de la construcción de movimientos sociales y de jóvenes que buscarán el respeto por los derechos humanos y la democracia en Colombia.

Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos lamenta la muerte del defensor de los derechos humanos y la paz, padre Gabriel Izquierdo Maldonado

Bogotá, septiembre 27 de 2016

La Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos expresa su profunda tristeza por la muerte del sacerdote jesuita Gabriel Izquierdo Maldonado, ocurrida la noche del 25 de septiembre, en una clínica de Bogotá.

La Oficina hace un reconocimiento público del inmensurable trabajo en derechos humanos y por la paz realizado por el padre Gabriel Izquierdo, durante toda su vida.

El padre Gabriel no escatimó un solo esfuerzo para defender los derechos de las víctimas, de los afrodescendientes, de los indígenas, de los campesinos y de toda persona que viera vulnerados sus derechos. El padre Izquierdo trabajó además de forma incansable por la paz a través de la construcción de movimientos sociales y de jóvenes que buscarán el respeto por los derechos humanos y la democracia en Colombia. Asimismo, fue uno de los creadores del Cinep, Centro de Investigación y Educación Popular; miembro de la Comisión de Conciliación Nacional de la Conferencia Episcopal de Colombia; Coordinador del ‘Proyecto Nación’ del Instituto Pensar, y director del proyecto ‘La Manzana Jesuítica’, que incluía la restauración de la iglesia de San Ignacio y el fortalecimiento del patrimonio histórico de la Compañía de Jesús.

El padre Izquierdo nos deja como legado su enorme valentía frente a los actores armados, su empuje para sacar adelante proyectos de paz y su esperanza permanente frente al respeto de los derechos humanos en Colombia.

Foto: http://m.eluniversal.com.co/sites/default/files/201609/colp_119625.jpg